Teresa Echeverría Eguiguren

Que el amor que sembró Teresa Echeverría Eguiguren continúe floreciendo en cada corazón que tocó, inspirando coraje en los momentos difíciles y fortaleciendo la resiliencia en los desafíos. Que la gratitud por su legado nos guíe hacia la paz interior y la esperanza en un futuro luminoso. Recordemos su luz con cariño y aprendamos de su sabiduría, manteniendo viva su memoria a través de nuestros actos de bondad y compasión. En cada amanecer, encontremos motivos para sonreír y abracemos la vida con amor y esperanza, sabiendo que su espíritu perdura en nosotros.