En la luz eterna de la memoria de SEBASTIÁN PIÑERA ECHENIQUE, recordamos su legado de amor incondicional y coraje admirable. Su vida nos enseña la importancia de la resiliencia y la gratitud, recordándonos que en cada amanecer hay esperanza y en cada corazón hay paz. Sigamos adelante con valentía, abrazando cada día con la certeza de que el amor guía nuestro camino y la esperanza alimenta nuestra alma. Que su recuerdo nos inspire a ser mejores, a amar con generosidad y a vivir con autenticidad, honrando su memoria con actos de bondad y compasión.
Publicado en el archivo
8 de febrero de 2024