En la memoria de Santiago del C. Orellana Cancino, recordamos su amor profundo, su coraje valiente y su resiliencia inquebrantable. Que su legado nos inspire a abrazar cada día con gratitud, a enfrentar los desafíos con valentía y a cultivar la paz en nuestros corazones. A través de los momentos difíciles, recordemos que el amor siempre perdura, que la esperanza nos guía y que la luz de la vida brilla eternamente. En su honor, sigamos adelante con fe, fortaleza y compasión, manteniendo viva la llama de la esperanza en cada paso que damos.
Publicado en el archivo
19 de abril de 2020