Recordemos a Rosa Angélica con amor en nuestros corazones, su coraje y resiliencia nos inspiran a abrazar la vida con gratitud y esperanza. En su memoria, aprendamos a encontrar paz en los momentos difíciles, a seguir adelante con valentía y a apreciar cada instante con serenidad. Que su luz siga brillando en nosotros, recordándonos que el amor es eterno y que la esperanza es nuestra fuerza. En cada amanecer, en cada suspiro, encontremos la fortaleza para seguir adelante, con la certeza de que el amor y la esperanza nos guían en nuestro camino.
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4 de octubre de 2019