En memoria de Rodrigo Hernán Toledo Loyola, recordemos que el amor siempre perdura en el corazón, brindando coraje para enfrentar los desafíos con resiliencia. Que la gratitud por los momentos compartidos nos llene de paz y nos inspire a seguir adelante con esperanza, sabiendo que la luz de su recuerdo nos acompañará en cada paso. En cada amanecer y atardecer, en cada risa y lágrima, su espíritu de bondad y generosidad nos guiará hacia un mañana lleno de posibilidades y amor incondicional. Sigamos adelante con fe y amor en nuestros corazones.
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25 de noviembre de 2019