Que la luz eterna de Pina de la Luz Jaña Carvajal brille con amor en nuestros corazones, recordándonos el coraje de seguir adelante con resiliencia. En cada amanecer, en cada suspiro, encontremos la paz que ella irradiaba y la gratitud por haber cruzado nuestros caminos. Que su memoria sea un faro de esperanza que nos guíe en momentos oscuros, recordándonos que el amor perdura más allá de las fronteras de la vida. Que su legado nos impulse a abrazar cada instante con valentía y a encontrar en la adversidad la fuerza para renacer.
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20 de diciembre de 2019