Que la luz del amor que OSCAR SAA HERRERA compartió ilumine nuestros corazones con coraje para enfrentar desafíos, resiliencia para superar obstáculos, gratitud por cada momento y paz para encontrar consuelo. Recordemos su legado con cariño y aprendamos a abrazar la vida con esperanza, sabiendo que en cada amanecer hay nuevas oportunidades para crecer y ser mejores. Que su memoria sea un recordatorio de la fuerza que reside en el amor incondicional y la bondad que podemos cultivar en nuestro propio ser. Que su espíritu perdure en nosotros, inspirándonos a amar y vivir plenamente.
Publicado en el archivo
14 de enero de 2024