Que el amor que sembró Orlando Acevedo Varela en cada corazón florezca como un jardín de paz y esperanza. Con coraje, enfrentemos las adversidades con resiliencia y gratitud por los momentos compartidos. Su legado nos inspira a abrazar la vida con valentía, recordando que en cada amanecer hay un nuevo comienzo lleno de posibilidades. Que su luz siga guiando nuestros pasos en este camino, recordándonos que el amor perdura más allá de la distancia. En cada suspiro, encontremos la fortaleza para seguir adelante con una sonrisa que refleje su eterno legado de bondad.
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10 de abril de 2024