En el jardín de la memoria de Olga Cammas Martínez florecen las semillas de amor y esperanza que ella sembró con humildad y serenidad. Que su legado de luz guíe nuestros pasos en los días de sombra, recordándonos que cada instante es un regalo para compartir amor y cultivar la esperanza. Sigamos adelante con el corazón rebosante de gratitud por el tiempo compartido y la inspiración recibida, sabiendo que en cada amanecer encontraremos fuerzas para abrazar la vida con valentía y compasión. ¡Que su recuerdo siga iluminando nuestro camino con amor inagotable!
Publicado en el archivo
13 de mayo de 2019