En el corazón de cada amanecer, florece el recuerdo de Mirna Rojas de Porcile, irradiando amor incondicional y coraje. Su legado de resiliencia y gratitud nos invita a abrazar la vida con renovada esperanza y paz interior. Que su luz eterna nos guíe en tiempos de oscuridad, recordándonos la belleza de cada instante y la fuerza que reside en nuestras almas. En honor a su memoria, cultivemos la bondad, celebremos la vida con gratitud y abracemos el futuro con valentía. Que su espíritu amoroso nos inspire a vivir plenamente, con el corazón rebosante de amor y esperanza.
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2 de mayo de 2024