En honor a Mario Alfredo Reyes Araya, recordemos que el amor y la gratitud nos guían en momentos de dolor. Con coraje y resiliencia, abracemos la vida con la certeza de que la paz y la esperanza prevalecen en nuestros corazones. Que su legado nos inspire a enfrentar cada día con valentía y compasión, sabiendo que la luz que compartió sigue brillando en nosotros. En su memoria, cultivemos un espíritu de bondad y generosidad, recordando siempre que la vida, aunque frágil, es un regalo precioso que merece ser vivido con amor y esperanza.
Publicado en el archivo
29 de marzo de 2020