En el corazón de quienes amaron a Marina Victoria Silva Avendaño, perdura su luz que brilla con coraje y resiliencia, inspirándonos a abrazar cada día con gratitud y amor sincero. Que su legado de paz y esperanza nos guíe en nuestro caminar, recordándonos que en cada amanecer hay nuevas oportunidades para florecer y encontrar consuelo en los recuerdos compartidos. Que su espíritu amoroso y valiente nos enseñe que incluso en la oscuridad más profunda, podemos hallar la fortaleza para seguir adelante con fe y bondad en nuestros corazones.
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27 de abril de 2020