En la luz eterna de María Elena Vidal von Bischoffshausen, encontramos un legado de amor, coraje y gratitud que ilumina nuestros corazones. Que su resiliencia inspire la nuestra, recordándonos que en cada desafío hay una oportunidad para crecer. Que su paz interior nos guíe en momentos de turbulencia, recordándonos que la calma reside dentro de nosotros. Que su recuerdo nos impulse a abrazar la vida con valentía y compasión, sabiendo que cada paso que damos está lleno de posibilidades. En su memoria, encontramos fuerza y esperanza para seguir adelante con amor y bondad.
Publicado en el archivo
9 de abril de 2020