Que la luz del amor infinito que Luisa Urrestarazú de Melero compartió con el mundo siga brillando en cada corazón, recordándonos siempre la importancia de la generosidad, la valentía y la gratitud en cada paso que damos. Que la paz que ella buscaba con fervor nos guíe en momentos de incertidumbre, recordándonos que la resiliencia y la esperanza son nuestras aliadas en medio de las tormentas. Unidos en el recuerdo de su legado de amor y bondad, sigamos adelante con la certeza de que, a través de nuestros propios actos de amor y compasión, su espíritu vive eternamente.
Publicado en el archivo
20 de enero de 2024