En honor a Lucía Paradisi Haase, recordemos que en cada amanecer encontramos la fuerza para abrazar la vida con gratitud y coraje. Que la suave brisa nos susurre al oído que la resiliencia es nuestra aliada en los momentos de adversidad, y que el amor siempre encuentra su camino para sanar nuestras heridas más profundas. Sigamos adelante con esperanza en el corazón, sabiendo que en la oscuridad más profunda aún brilla la luz de la paz interior. En cada paso que damos, recordemos el legado de Lucía y vivamos con integridad y compasión.
Publicado en el archivo
30 de enero de 2020