En memoria de Laura Achondo Álvarez, recordemos que el amor y la gratitud son semillas de luz que cultivan la esperanza en nuestros corazones. Con coraje y resiliencia, abracemos la vida con valentía y aceptación, encontrando paz en cada amanecer. Agradezcamos por las huellas de amor que Laura dejó en su camino, inspirándonos a vivir con pasión y compasión. Que su recuerdo nos impulse a ser mejores seres humanos, llenando el mundo con bondad y esperanza. En cada suspiro, encontremos la fuerza para seguir adelante con fe y gratitud, honrando su legado con amor.
Publicado en el archivo
12 de abril de 2020