Recordemos a Javier Basilio Duhart Acuña con gratitud por su amor inquebrantable. Su coraje nos inspira a ser resilientes. Que su paz interior nos guíe en momentos de turbulencia. Sigamos adelante con esperanza, manteniendo viva su llama en nuestros corazones. Cada nuevo amanecer nos brinda la oportunidad de honrar su legado, abrazando la vida con valentía y compasión. En cada sonrisa, en cada lágrima, encontremos la fuerza para seguir adelante, sabiendo que el amor perdura más allá de las despedidas. ¡Que la luz de su espíritu ilumine nuestro camino hacia un futuro lleno de amor y paz!
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10 de junio de 2019