En el legado de GASTÓN URZÚA REVECO encontramos un faro de amor inquebrantable, un refugio de coraje y una fuente de resiliencia inagotable. Que su memoria nos inspire a afrontar cada día con gratitud, a abrazar las adversidades con valentía y a cultivar la paz en nuestro interior. Recordemos siempre que en los momentos más oscuros, la luz del amor propio y la esperanza inquebrantable brillan con mayor intensidad. Sigamos adelante con humildad, con el corazón lleno de nobleza y la mente abierta a todas las posibilidades que la vida nos ofrece.
Publicado en el archivo
23 de marzo de 2024