Que la luz del amor y la valentía que Gabriela llevaba en su corazón siga brillando en cada uno de nosotros, recordándonos la fuerza de la resilencia y la gratitud en tiempos difíciles. Que su legado nos inspire a abrazar cada día con esperanza y a enfrentar los retos con coraje y bondad. Que en los momentos de silencio encontremos paz y consuelo, sabiendo que su espíritu vive en cada acto de amor y generosidad que compartimos. Que su memoria sea un faro de luz en la oscuridad, guiándonos hacia un futuro lleno de amor y esperanza.
Publicado en el archivo
21 de agosto de 2019