En honor a Fernando Norambuena Retamal, recordemos que en cada corazón late la fuerza del amor, la valentía de la resiliencia y la luz de la gratitud. Aceptemos las tempestades con coraje, sabiendo que tras cada lluvia hay un arcoíris de paz esperando por nosotros. Que su legado inspire nuestros días con la determinación de seguir adelante con esperanza, transformando desafíos en oportunidades y contratiempos en lecciones de vida. Que cada paso que demos esté lleno de bondad y compasión, recordando siempre que el amor es la fuerza que nos une y nos guía.
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29 de julio de 2019