Que la luz del amor que Fernando Jácome Guzmán sembró en cada corazón siga brillando con coraje y resiliencia. En su memoria, recordamos la gratitud por su legado de bondad y esperanza. Que en los momentos de oscuridad, encontremos la paz en los recuerdos que nos unen. Sigamos adelante con la certeza de que el amor perdura más allá de la vida terrenal, guiándonos con suavidad y fortaleza. Que cada amanecer nos regale la oportunidad de honrar su memoria con acciones que reflejen su luz en el mundo. ¡Siempre en nuestros corazones, eternamente en nuestro espíritu!
Publicado en el archivo
28 de noviembre de 2019