Que la luz del amor que EUGENIO MUSALEM AIACH compartió brille en nuestros corazones como un faro de esperanza y gratitud. Que su coraje y resiliencia nos inspiren a abrazar la vida con valentía, recordando siempre que la paz interior es nuestro mayor tesoro. En cada amanecer, en cada susurro del viento, encontremos consuelo y fuerza para seguir adelante, sabiendo que el amor perdura más allá de las palabras. Que su legado de bondad nos recuerde que la vida es un regalo precioso, y que en cada desafío encontramos la oportunidad de crecer y florecer.
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7 de octubre de 2023