En el rincón más luminoso de nuestros corazones, Esteban Zabaleta Urcelay seguirá inspirando amor incondicional y coraje infinito. Su legado de resiliencia y gratitud nos motiva a abrazar cada día con renovada esperanza, recordando que la paz interior es la llave que abre las puertas de la felicidad. Mantengamos viva su memoria celebrando la belleza de la vida, acogiendo con valentía los desafíos y compartiendo bondad sin límites. Que su espíritu generoso nos guíe en el camino, recordándonos que la luz del amor verdadero nunca se desvanece, sino que brilla eternamente.
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15 de marzo de 2024