En el jardín del corazón de Erika Ana Guzmán Bustamante florecen semillas de amor inquebrantable y coraje indomable, que nos guían hacia la luz en momentos de sombra. Que su legado de resiliencia y gratitud perdure como un faro de paz en nuestra travesía, recordándonos que en cada desafío hay una oportunidad para crecer y sanar. Sus huellas nos invitan a abrazar la vida con amor incondicional y esperanza renovada, sabiendo que en la oscuridad también brillan estrellas de infinita bondad. Que su memoria sea el canto suave que nos alienta a seguir adelante con fuerza y ternura.
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23 de noviembre de 2023