En memoria de Eduardo Daniel Angulo Ibáñez, recordemos que la vida nos enseña a amar con valentía, a ser fuertes con gratitud y a encontrar la paz en la resiliencia. Que su luz guíe nuestros corazones hacia un mañana lleno de esperanza y amor inquebrantable. Que cada paso que demos sea un tributo a su memoria, recordándonos que la vida es un regalo precioso que merece ser vivido con pasión y compasión. Sigamos adelante con coraje, encontrando consuelo en los recuerdos y fortaleza en el amor que perdura más allá de la despedida.
Publicado en el archivo
10 de febrero de 2024