En honor a la memoria de Cristián José Valenzuela de la Cerda, recordemos que en cada amanecer existe la oportunidad de abrazar con gratitud la vida, de ser valientes ante las adversidades y de encontrar paz en nuestros corazones. Que su legado nos inspire a cultivar el amor incondicional, a nutrir la resiliencia en tiempos de incertidumbre y a sostener la esperanza como una luz eterna que guía nuestro camino. Que la fuerza de su espíritu perdure en cada paso que demos, recordándonos siempre que la vida es un regalo precioso que merece ser vivido con plenitud y autenticidad.
Publicado en el archivo
8 de octubre de 2019