En el recuerdo eterno de Cecilia Clementina Eyrien Jessen, encontramos la luz del amor que guía nuestros corazones, la fuerza del coraje que nos impulsa a seguir adelante y la resiliencia que nos inspira a afrontar los desafíos con valentía. Que su legado de gratitud y paz perdure en cada amanecer, recordándonos que la vida es un regalo precioso que merece ser vivido con intensidad y esperanza. Que en cada paso que damos, encontremos la serenidad y la esperanza que nos invita a abrazar con gratitud cada instante, con la certeza de que el amor y la esperanza nos acompañan en todo momento.
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11 de marzo de 2020