Que la luz del amor que Carmen Ovalle Barros de Cruz compartió con el mundo siga brillando en nuestros corazones, recordándonos la importancia de vivir con coraje y gratitud. Que su ejemplo de resiliencia nos inspire a abrazar cada momento con esperanza y paz, sabiendo que el amor perdura más allá del tiempo y el espacio. En su memoria, celebremos la vida con la certeza de que cada día nos regala la oportunidad de amar, aprender y crecer. Que su legado de amor y bondad nos guíe siempre por el camino de la compasión y la humildad.
Publicado en el archivo
3 de octubre de 2019