En memoria de Carla Giangrandi Santa Cruz, recordemos que en cada amanecer surge una nueva oportunidad para abrazar con amor la vida, enfrentar desafíos con coraje, y cultivar la resiliencia que nos fortalece. Que la gratitud por los pequeños momentos nos guíe en medio de la pena, y que en la profundidad de nuestro ser encontremos la paz que tanto anhelamos. Cada latido es un recordatorio de la belleza efímera de existir, y en cada suspiro hallamos la fuerza para seguir adelante, manteniendo viva la llama de la esperanza en nuestro ser.
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18 de abril de 2020