Recordemos a Arturo Yrarrázaval Covarrubias con gratitud por su amor inquebrantable y su coraje ante la adversidad. Su legado nos inspira a abrazar la vida con resiliencia y esperanza, recordando que en cada amanecer hay una oportunidad para renovar nuestro espíritu. Que su memoria nos guíe hacia la paz interior y nos llene de fuerza para seguir adelante con valentía y compasión. En sus enseñanzas perdura la luz de un corazón generoso, invitándonos a cultivar el amor en cada paso que damos. Que su recuerdo sea un faro de esperanza en nuestro caminar.
Publicado en el archivo
29 de enero de 2024