En memoria de Analía Cortés Ubeda, recordemos que el amor de una vida perdura en la eternidad, infundiendo coraje en nuestros corazones para abrazar la resiliencia en tiempos de adversidad. Que la gratitud por los momentos compartidos ilumine nuestro camino y nos guíe hacia la paz interior. En cada sonrisa, en cada lágrima, en cada suspiro, encontremos la fuerza para seguir adelante con la esperanza como brújula que nos orienta hacia un mañana lleno de posibilidades y nuevos amaneceres. ¡Que su luz siga brillando en cada uno de nosotros!
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17 de noviembre de 2019