En la memoria de Alberto Aníbal Emilio Chaigneau Del Campo, recordemos el amor inquebrantable que sembró en cada corazón, la valentía que mostró en cada desafío, la resiliencia que demostró en cada adversidad. Sigamos adelante con gratitud por los momentos compartidos, con la paz que solo el tiempo y el perdón pueden brindar. Que su legado nos inspire a abrazar la vida con renovada esperanza, a enfrentar los días con fortaleza y compasión. En cada amanecer, en cada anochecer, que su espíritu nos guíe hacia la luz que siempre brilla en nuestro interior.
Publicado en el archivo
14 de noviembre de 2019