Recordemos a Aida del Carmen Núñez Espinoza con amor en nuestros corazones, inspirándonos en su coraje y resiliencia. Que su espíritu nos guíe a través de los momentos difíciles, recordándonos la importancia de la gratitud y la paz interior. Sigamos adelante con esperanza, sabiendo que cada día es una oportunidad para abrazar la vida con valentía y compasión. Que su legado nos enseñe a valorar cada instante, a abrazar a nuestros seres queridos y a enfrentar los desafíos con determinación. En su memoria florece un jardín de esperanza que nos impulsa a seguir adelante.
Publicado en el archivo
28 de julio de 2019