En memoria de María Yolanda Diez Urzúa, recordamos su amor inquebrantable que sigue iluminando nuestros corazones en los momentos oscuros. Que su coraje y resiliencia nos inspiren a enfrentar cada desafío con valentía y determinación. Agradezcamos cada instante de vida con gratitud, honrando su legado de bondad y generosidad. Encontremos paz en los recuerdos compartidos, sabiendo que su luz perdura en cada sonrisa y gesto amable. Sigamos adelante con esperanza, sabiendo que el amor que nos unió nunca se desvanece, siempre presente en cada latido de nuestros corazones.
Fernando Valenzuela Luco e hijos