En memoria de Juana Luisa Quispe Astorga, recordemos que en cada amanecer se esconde un nuevo comienzo lleno de amor y gratitud. Que su legado de coraje y resiliencia nos inspire a abrazar la vida con valentía y esperanza, encontrando en cada desafío una oportunidad de crecimiento. Que la paz que habitaba en su corazón perdure en el nuestro, guiándonos en los momentos de oscuridad hacia la luz del amor incondicional. ¡Que su memoria nos impulse a vivir con pasión y compasión, honrando su vida con cada acto de bondad!
Sus funerales se efectuaron ayer en el Cementerio General de forma privada.