En memoria de Antonia Brizich Marinelich, recordamos que en cada corazón late la fuerza del amor que trasciende la distancia y el tiempo. Que el coraje sea nuestro aliado en las batallas cotidianas, y la resiliencia nuestra armadura frente a la adversidad. Cultivemos la gratitud por las pequeñas alegrías y por los seres que iluminan nuestro camino. Encontremos la paz en el presente, sabiendo que el futuro guarda promesas de nuevos amaneceres. Con cada paso, recordemos que el amor perdura, y que la esperanza nos guía hacia un mañana lleno de posibilidades.
Sus funerales se efectuaron en Punta Arenas.La familia