Que la luz del amor que Rosa Mercedes Páez Martínez irradiaba siga iluminando nuestros corazones, recordándonos que en la grandeza de la vida encontramos el coraje para seguir adelante. Su resiliencia nos inspira a abrazar cada amanecer con gratitud y afrontar los desafíos con valentía. Que su legado de paz se convierta en un refugio en los momentos de tormenta, recordándonos que incluso en la oscuridad más profunda, siempre hay un destello de esperanza. Sigamos su ejemplo, abrazando la vida con amor y fe inquebrantable en el mañana.
Sus funerales se realizaron ayer 16 de mayo en el Cementerio Parque La Oración de Los Andes.