Que la luz del amor que Manuel González Martin sembró en cada corazón siga brillando con coraje y resiliencia. Que podamos aprender de su ejemplo y llenar cada día con gratitud, abrazando la vida con esperanza y paz. Recordemos que cada desafío es una oportunidad para crecer y que el amor es la fuerza que nos sostiene en los momentos más difíciles. Que su memoria nos inspire a ser compasivos y valientes, extendiendo una mano amiga a quienes más lo necesitan. Que su legado perdure en cada acto de bondad y en cada palabra de aliento que compartimos.
Sus funerales se efectuaron en el Cementerio Parque del Recuerdo, luego de una misa en la iglesia Santa Teresita de Los Andes.Andrea Schmidt Valdivia y familia