En la luz eterna de María Eugenia Tormo Miranda brillan el amor inquebrantable y la fortaleza insondable, recordándonos que la resiliencia es la semilla de la esperanza. En su recuerdo, abracemos cada día con gratitud y valentía, sabiendo que el amor perdura más allá de la distancia. Que la paz interior sea nuestra guía en los momentos de tormenta, y que la memoria de su bondad ilumine nuestro camino en la oscuridad. Sigamos adelante con el corazón ligero, sabiendo que su legado de amor perdurará en cada alma que tocó.
Sus funerales se efectuarán hoy en el Cementerio Parque del Recuerdo, después de una misa de responso que se oficiará a las 10:00 horas (Av. Ortúzar 1070, Ñuñoa).Familia Tormo Miranda