Que la luz del amor que Ana Monge Donoso compartió con el mundo siga brillando en nuestros corazones, llenándonos de coraje para enfrentar los desafíos con resiliencia y gratitud. En su memoria, recordemos que en los momentos de oscuridad, siempre podemos encontrar la paz si abrimos nuestros corazones al amor y la esperanza. Sigamos adelante con valentía, sabiendo que cada paso que damos nos acerca a la calma y la serenidad. Ana nos enseñó que en la unión de todas nuestras emociones y cualidades, reside la fuerza para superar cualquier adversidad.
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16 de octubre de 2019