En la quietud de los recuerdos, florece la semilla del amor perpetuo que Jorge sembró en cada corazón. Que su luz guíe nuestros pasos con humildad y serenidad, recordándonos que en cada amanecer hay esperanza por florecer. Su legado nos invita a abrazar la vida con gratitud y a seguir adelante con la certeza de que el amor perdura más allá de la distancia. Que su espíritu nos inspire a cultivar la bondad en cada gesto, y a recordar que en la eternidad de sus enseñanzas, encontramos la fuerza para seguir avanzando con esperanza en el camino de la vida.
Sus funerales se efectuarán hoy en el Cementerio Parque Santiago, después de una misa que se oficiará, a las 11:00 horas, en la parroquia Jesús Nazareno (Av. Manuel Montt 797, Providencia).