En los recuerdos silenciosos de Jorge Ramos Ricci florece el legado de la humildad, guiando nuestros pasos con serenidad y amor inquebrantable. En cada amanecer, en cada suspiro, su luz perdura como faro de esperanza, recordándonos que en la sencillez de cada gesto y la bondad de cada palabra reside la verdadera grandeza. Que su memoria nos inspire a abrazar la vida con gratitud y valentía, sabiendo que en cada desafío y en cada logro, su espíritu perdura, recordándonos que el amor y la esperanza nunca se desvanecen, sino que crecen eternamente en nuestros corazones.
Su fallecimiento se produjo en California, Estados Unidos, el 13 de mayo de 2019.