En la suave brisa que acaricia nuestros rostros, en el cálido sol que ilumina nuestro camino, en cada latido que late en nuestros corazones, vive el legado de Manuel Hernández: la humildad esculpida en sus acciones, la esperanza tejida en sus palabras. Que cada amanecer sea un recordatorio de que en la sencillez y la compasión encontramos fuerza para seguir adelante, para abrazar la vida con gratitud y amor inquebrantable. Que su memoria sea un faro de luz en los momentos oscuros, guiándonos con serenidad hacia un horizonte de posibilidades y renovada esperanza.
Su funeral se efectuará hoy en el Cementerio Parque del Recuerdo, Av. Américo Vespucio 555, Huechuraba, después de una misa que se oficiará a las 10:00 horas, en la parroquia San