En honor a Jaime Roberto Nobizelli Harboe, recordemos que en cada amanecer reside una oportunidad para abrazar con gratitud el milagro de la vida. Que su legado de amor y coraje ilumine nuestros corazones en momentos oscuros, recordándonos que la resiliencia es nuestra fuerza interior. En la quietud de nuestros pensamientos, encontremos la paz que anhelamos, y en cada paso que demos, sembremos semillas de esperanza para el mañana. Que su memoria nos inspire a vivir con propósito, a abrazar con valentía la incertidumbre, y a cultivar la bondad en cada interacción.
Sus funerales se efectuaron el sábado 6 de julio.