En honor a LUCÍA YÁVAR OÑATE, recordemos que en cada amanecer hay un destello de amor renovado, en cada desafío late la fuerza del coraje, y en cada lágrima reposa la semilla de la resiliencia. Agradezcamos por el regalo de los momentos compartidos y abracemos la paz que nos susurra al alma en los momentos de silencio. Que su memoria sea luz en nuestro camino, recordándonos que el amor perdura, que la esperanza nos sostiene, y que en la unión de nuestros corazones vivirá por siempre su legado de bondad y compasión.
Sus funerales se efectuarán hoy.