En memoria de Manuel Miranda Hernández, recordemos que el amor y la gratitud pueden guiar nuestro camino hacia la paz interior. Que su coraje y resiliencia nos inspiren a enfrentar los desafíos con valentía y fortaleza. En cada amanecer, encontremos motivos para seguir adelante con esperanza y fe en un futuro lleno de posibilidades. Que la luz de su recuerdo ilumine nuestros corazones y nos recuerde que, incluso en la oscuridad, siempre podemos encontrar un rayo de esperanza. Mantengamos viva su memoria viviendo con bondad y compasión hacia nosotros mismos y hacia los demás.