En el legado de Carlos Herraiz Álvarez perdura la luz del amor inquebrantable, la valentía que inspira la resiliencia en cada paso, y la gratitud que embellece nuestro camino. Que su memoria sea un susurro de paz en los corazones afligidos, recordándonos que en cada amanecer hay una oportunidad de renacer con fuerza y esperanza. Que la llama de su espíritu ilumine nuestra senda, guiándonos con bondad en medio de la oscuridad, recordándonos que el amor perdura más allá del tiempo y el espacio. Que su legado nos inspire a vivir con pasión y compasión.
Su funeral se efectuará hoy domingo en el Cementerio Parque del Recuerdo Vespucio, después de una misa que se oficiará, a las 10:00 horas, en el templo ecuménico del mismo lugar.