Con amor en el corazón y coraje en el espíritu, recordemos a Juan Diego Cruz Lindquist con gratitud por su luz que brilla eternamente. Que su ejemplo de resiliencia nos inspire a abrazar la vida con esperanza y valentía, encontrando paz en cada paso que damos. En el recuerdo de su ser, encontremos fuerza para seguir adelante, sembrando amor y bondad en cada trayecto de nuestro camino. Que su legado perdure como un faro de esperanza, guiándonos con su luz en los momentos oscuros, recordándonos que en medio de la adversidad, siempre hay espacio para el florecimiento del alma.
Sus funerales se efectuarán hoy, a las 16:30 horas, en el Cinerario del Cementerio Parque Manantial.