En memoria de Juan Ruge Moya, recordemos que el amor es el legado más valioso que podemos dejar. Que su coraje y resiliencia nos inspiren a abrazar cada día con gratitud, afrontando los desafíos con valentía. En medio de la tristeza, cultivemos la paz interior que nos permite seguir adelante, confiando en que el tiempo suavizará el dolor. Que su memoria sea un faro de esperanza, recordándonos que cada momento es una nueva oportunidad para amar, crecer y encontrar la luz en la oscuridad.
Sus funerales se efectuaron en San José, Costa Rica.