En memoria de Juan Ruge Moya, que su valentía ilumine nuestro camino con amor inquebrantable. Que su resiliencia nos inspire a abrazar cada día con gratitud, recordando que en los momentos oscuros reside la semilla de la esperanza. Que en su recuerdo encontremos paz, y en su legado, fuerza para enfrentar las adversidades con determinación y fe. Que su luz siga brillando en nuestros corazones, recordándonos que la vida es un regalo precioso que merece ser vivido con pasión y compasión. Que su espíritu nos guíe hacia un mañana lleno de amor y armonía.
Y acompañamos en su dolor a Patricia O'Shea y a sus hijas Francisca, Andrea y Victoria. Sus funerales se realizaron en San José, Costa Rica.